Una de las cosas que nos identifica como mujeres es siempre querer hacer cambios. Cambiamos los muebles de la casa, los accesorios, la ropa y, por sobre todo, nuestro cabello. Hacer cambios en nuestro estilo es lo más entretenido que nos podamos imaginar, combinar el maquillaje con el peinado es parte de la rutina, más aún hoy que están de moda los pelos cortos como el estilo Bob.
Pero, ¿qué pasa cuando tenemos el pelo tan corto que lo único que podríamos hacernos es raparnos? En este punto siempre es necesario esperar que el pelo crezca, pero su demora nos vuelve locas la mayoría de las veces, por eso te entregaremos unos tips muy útiles para que puedas hacer que crezca más rápido.
Corta las puntas
Cada seis meses es necesario ir cortando las puntas del cabello para que se vaya renovando y creciendo con más fuerza. Aunque a veces dé desconfianza decirle a la peluquera “sólo las puntas”, debemos arriesgarnos si queremos fortalecerlo y entregarle salud y vitalidad.
Fortalecedor natural
El romero es una planta maravillosa para el pelo, lo fortalece muchísimo. Sería estupendo que agregaras algunas gotas de aceite de romero a tu champú (o en su defecto aceite de oliva), sino podrías dejar tu pelo mojado con una infusión de romero y luego enjuagar normalmente.
Champuses especiales
Hoy el mercado nos ofrece una amplia gama de productos para el cabello, entre ellos hay algunos champuses o acondicionadores para el crecimiento del cabello que no estaría de más probar, sólo intenta que sea lo más natural posible para que no dañen tu pelo.
Masajea tu cuero cabelludo
Cuando estés aplicando el acondicionador o cremas que uses para tu pelo, preocúpate de masajear el cuero cabelludo para ayudar con la circulación de la sangre y aumentar el crecimiento del cabello.
Agua fría
El agua fría trae mucho beneficios para el cabello y la piel, ayuda a cerrar los poros y vasos que queden abiertos. Favorece la fuerza, el crecimiento y el brillo del cabello, por tanto, si no soportas bañarte con agua helada, puedes hacerlo solamente en el último enjuague.
Fotografía: Alessandra Celauro/ Flickr
