La religión Rastafari es a los ojos de la mayoría de las personas una excusa para andar con el pelo largo, a veces sucio y enredado, pero más que cualquier otra cosa, una excusa para fumar marihuana con una razón que lo sustente. Nosotros te contaremos cómo nació esta ideología, algunos de sus postulados básicos y el porqué de su apariencia.
El Rastafarismo es creación única de Haillé Selassie, emperador etíope durante la década de 1930. La denominación Rastafari proviene de la unión de los dos nombres de pila del emperador Selassie: Ras Tafari Makhonen. La ideología llega a Jamaica en 1945 gracias a Marcus Garvey. A quien se le considera un héroe nacional y líder de ese país.
El Rastafarismo se inició con la depresión de 1929, cuando cerca de 20.000 jamaiquinos regresaron a su tierra al finalizar sus contratos de trabajo en diversos países como Cuba y Panamá. El impulso del Rastafarismo empieza con tres repatriados: Leonard Howell, Archibald Dunkley y Joseph Hibbert que por separado empezaron a propagar la divinidad de H.I.M. Selassie I, quien había sido coronado emperador de Etiopía. Haillé Selassie era, según la interpretación bíblica, el representante de Dios en la tierra.
“JAH” es el Todopoderoso y a quien los verdaderos creyentes aman y le dedican plegarias y cantos. Parte importante para los verdaderos creyente es fumar marihuana (o como le dicen ellos “Ganja” o “kaya”) para poder conectar su alma con Jah, así como en otras culturas se utiliza el peyote o los hongos alucinógenos para poder tener revelaciones sagradas o mágicas. Usan la “ganja” en sus ceremonias religiosas y en la cotidianeidad: “… es un elemento que fortifica el cuerpo y el alma”. La ganja es tan respetada que los rastas se lo dan a los recién nacidos en forma de té en el primer día de vida. La conciben como un medio para superar la muerte y la enfermedad. En las iglesias funciona como incienso de Dios y la queman para adorarlo.
Es un fenómeno social religioso cuya característica principal es no aceptar los valores impuestos por la ideología dominante. Las bases fundamentales de sus movimientos de protesta se encuentran en la Biblia, utilizada como una herramienta de análisis para los explotados, no sólo de sistema social injusto sino también de la religión establecida.
En términos estrictos, el movimiento tiene 4 temas centrales:
- La repatriación,
- La superioridad de los negros
- El reconocimiento de JAH RASTA (el espíritu que todos poseen)
- Las conexiones históricas con los hijos de Israel.
Los rastafaris se dividen en dos grupos:
- Los políticos: Se interesan primordialmente en las maneras de retornar a África y las formas para obtener su nacionalidad.
- Los religiosos
La ideología rastaman no acepta la homosexualidad porque piensa que no es natural y que por eso Dios creó al hombre y a la mujer. También consideran que las mujeres no son rastas de corazón. Ellos son antifeministas, están en contra del aborto y piensan que el alto índice de natalidad es algo que los rastas deben aceptar como la voluntad de Dios. Desaprueban los métodos anticonceptivos porque los consideran un asesinato. Y piensan que un miembro de su grupo no es responsable hasta que tiene un hijo.
Dentro de su aspecto físico, las trenzas entretejidas con su pelo tienen un nombre y significado específico: Dreadlocks, que significa trenzas del terror. Las usan hasta debajo de los hombros como los guerreros etíopes y las cubren con gorros (Tams) tejidos con los colores de la bandera de Etiopía y de Jamaica: verde, amarillo, rojo y negro. Usan la barba al estilo de Ras Tafari. No compran ni utilizan ropa usada y no comen alimentos que no sean preparados por uno de sus miembros. Muchos rastafaris son vegetarianos o simplemente no comen cerdo ni beben alcohol.
El Rastafarismo es una expresión de profundo descontento social que se transmite a través de la música, el arte, la pintura y otros valores culturales. Se caracteriza por transmitir al mundo a través de su música elementos de liberación espiritual. Sus canciones están impregnadas de una crítica a la sociedad dominante, donde lo importante es afianzarse en sus raíces africanas y afirmar su presencia en la cultura jamaiquina, formando una conciencia racial.