Es una enfermedad oftalmológica degenerativa, que en la mayoría de los casos afecta a personas de una misma línea familiar, afectando a 1 de cada 2.000 personas a lo largo del mundo.
El Queratocono es una patología que afecta a la córnea, la superficie anterior del ojo, la cual se adelgaza y desarrolla una protuberancia en forma de cono. Este problema afecta a personas jóvenes, entre 18 – 35 años. El hecho de que se presente antes de los 18 años se considera especialmente grave, y obliga a tomar medidas drásticas.
Según el oftalmólogo del Centro Oftalmológico Puerta del Sol, doctor Sergio Tabilo, la córnea se va deformando paulatinamente debido a la falta de estabilidad estructural, lo que impide que el tejido cumpla su función óptica y refractiva.
Sumado a esto la deformación de la córnea produce un astigmatismo irregular muy difícil de corregir con anteojos, que ocasiona profundos trastornos visuales.
La causa de esta enfermedad todavía no se conoce. Sin embargo se piensa que el factor hereditario es muy relevante, ya que el 10% de los casos de las personas con Queratocono tienen un familiar con esta enfermedad.
El primero de los síntomas que se presenta es la visión borrosa progresiva, que sorprende por la rapidez de su avance. Es muy frecuente que el paciente consulte diferentes oftalmólogos, obteniendo diferentes recetas ópticas, con las que no obtiene una visión satisfactoria.
Una vez hecho el diagnóstico, el tratamiento se enfoca en dos vertientes:
1. Control de la Enfermedad.- Con respecto al control de la enfermedad, éste pretende detener el incurvamiento y eventual adelgazamiento del tejido. Para ello hoy día existen dos técnicas, que son el Cross Linking Corneal y el implante de Segmentos de Anillos Estromales. La combinación de ambos es particularmente efectiva. Si el paciente logra estabilizarse mediante éstas técnicas, lo mas probable que no tenga que llegar al transplante corneal.
2. Rehabilitación Visual.- La mejor rehabilitación visual se obtiene mediante el uso de lentes de contacto especializados, que logran una visión óptima, con buen nivel de tolerancia. Se entiende por tal caso el paciente que logra trabajar y/o estudiar al menos 8 horas díarias usándolos en forma cómoda.
La gran conclusión es que se hace cada vez mas importante el diagnóstico precoz de la enfermedad, y así poder ofrecer todas las alternativas de tratamiento disponibles, evitando de ésta manera secuelas visuales que pueden llegar a ser irreversibles.
Dr. Sergio Tabilo Lattapiat – Oftalmólogo.
Centro Oftalmológico Puerta del Sol
