El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dice estar abierto a la instalación de nuevas plataformas petroleras en la costa de Norteamérica. A pesar de que el 20 de abril pasado explotó y se hundió una planta petrolera de BP plc en las cercanías al Golfo de México.
Como “brutales” encuentran muchas organizaciones ambientalistas como Sea Shepherd, las declaraciones del actual habitante de la Casa Blanca. Teniendo en cuenta la explosión del veinte de abril, que amenaza ser una catástrofe ecológica de gran envergadura, y que pudo ser prevenida, según el Director de Investigación y ex agente de la EPA, Scott West.
Según su investigación, la explosión y derrame de petróleo pudo haber sido evitado si se hubiera permitido que el ex agente de la EPA, Scott West, siguiera con la investigación de la negligencia de la Petrolera Británica (BP), en Alaska durante 2006. West dice que de haber terminado esa investigación, se hubiesen incrementado las medidas de seguridad para evitar este tipo de catástrofes.
En el informe, West aseguraba que algunos de los ejecutivos de BP deberían haber ido a la cárcel, sin embargo al no poder terminar la investigación, la empresa sólo pagó una multa de 20 millones de dólares y se declaró culpable de un delito de menor cuantía.
Nuevamente la justicia es ciega al momento de dictar sentencia y hacer valer los derechos de toda la sociedad en pos de un océano limpio y sano. La conservación de las especies marinas ha sido un problema desde siempre, desde la caza de ballenas hasta los pescadores piratas. Cuidar el medio ambiente marino es de vital importancia, pero mientras los gobiernos de las grandes potencias como Estados Unidos, China y Japón no se den cuenta y comiencen un proceso de reformas legales y sociales, organismos de ayuda marina, como Sea Shepherd seguirán existiendo.
Fuente: www.seashepherd.org
