Mientras algunos corren por los centros comerciales comprando los últimos regalos, otros simplemente se resisten a estas fechas. Especialista en Calidad de Vida de la Universidad del Pacífico comparte algunos consejos para volver a ver y vivir la Navidad como una oportunidad.
Si bien la Navidad es una celebración ligada al mundo cristiano, hoy día es una festividad masificada que posee diversas connotaciones, más allá de la religiosa, que invita al encuentro amoroso con los que más se quiere. “La Navidad debe ser una oportunidad para reunirse con nuestros seres queridos y expresar nuestros buenos deseos, afectos y sentimientos más profundos, reencontrarnos con quien nos hemos distanciado e incluso plantearnos objetivos y metas a alcanzar el año que se avecina en un sentido espiritual”, comenta Karina Gatica, docente de la cátedra de Calidad de Vida de la Facultad de Ciencias Humanas y Educación de la Universidad del Pacífico.
Por lo mismo, la experta se suma a lo que muchos plantean en términos de que no importa cómo pasamos la Navidad. “No importa en la casa de qué familiar nos reuniremos, de qué se compondrá la cena navideña o el lugar que se escogerá para el ‘carrete’, en el caso de los más jóvenes. Lo importante es con quién estaremos, es decir, la compañía que elijamos para pasar esta fecha y el sentido que le damos”, precisa la docente.
Para Karina Gatica un ejemplo de dónde podemos hacer un claro gesto de Navidad con sentido es a través del regalo, ya que esta costumbre desafortunadamente muchas veces se nos vuelve una obsesión, otorgándole mucho tiempo en largas caminatas, mucho gasto y deudas en exceso. “Lamentablemente en esta fiesta, muchas veces se realza más su carácter comercial, perdiendo el verdadero sentido que tiene hacer un obsequio. Definitivamente la idea del regalo es pensar en la persona a quien se lo daremos, en sus preferencias y necesidades, por ende, es mucho más valorado qué tanto acertamos con nuestros regalos más que el dinero que gastemos en él”, asegura.
La especialista en Calidad de Vida hace un llamado a pensar en el origen del regalo en Navidad, el cual es compartir con quienes lo necesitan. “Por ello, también es una oportunidad de contribuir con tarjetas navideñas y obsequios que aportan al trabajo que realizan instituciones de carácter social, que son gestos que en definitiva son un aporte a nuestras relaciones afectivas que tanto bienestar nos reportan y que contribuyen a mejorar nuestra calidad de vida”, indica.
Entre los aportes que podemos hacer en estas fiestas para tener una Navidad con sentido menciona las siguientes:
– Un regalo para las Aldeas Infantiles S.O.S., que dispone en su página web de juguetes y cenas navideñas para comprar fácilmente por Internet.
– Sumarse a la campaña de la Reforestación de la Patagonia chilena, regalando árboles nativos para plantar e incluso regalar un bosque.
– Tarjetas de saludos navideños de la Fundación San José con una variedad de 6 novedosas y creativas tarjetitas de saludos realizadas con dibujos inspirados en los niños de la fundación
– Regalos con sentido de la Fundación AIS donde se pueden encontrar recetarios, juegos de salón, libros, cuadros y esculturas, entre otros e incluso con la opción de despacho a domicilio.
– Sumarse a la campaña de Correos de Chile y con la posibilidad de descargar la carta en línea y apadrinar el sueño de niños de escasos recursos.