Los tacones son piezas fundamentales en el armario de toda mujer ya que muchas coinciden en que causan seguridad y hasta las hace sentir más sexys.
Sin embargo, es común escuchar las quejas que los mismos ocasionan en base de molestias y dolores, ¿cómo prevenirlas?, ¿cuándo usar tacones?, ¿de qué modo? Todas esas preguntas y más te las respondemos aquí para que no te quede ninguna duda y decidas qué es lo más conveniente para ti. Te presentamos los sí y los no de usar tacones.
VENTAJAS
– Los tacones estilizan la figura de la mujer y la hacen ver más sexy y penetrante. Tus piernas se verán más delgadas y alargadas.
– Estas piezas ayudan a crear un abdomen plano y una cintura perfecta. Seguramente te estarás preguntando cómo es esto posible: cuando se usan tacones necesitamos mantener nuestra postura enderezada y mantener el equilibrio, por lo tanto, para lograrlo, apretamos los músculos del abdomen inconscientemente.
– Usar tacones evita la posibilidad de contraer incontinencia urinaria gracias al fortalecimiento de los músculos pélvicos.
– También fortalecen los músculos de la pantorrilla y los glúteos mediante la presión que ejercemos sobre ellos.
– Los tacones incrementan la altura algo por lo que muchas mujeres suelen tener complejo.
– Se pueden usar con cualquier look de prendas ya que se adaptan fácilmente eso sí, ten en cuenta el color y el diseño (¡y que no sea un look sport!)
DESVENTAJAS
– Al usarlos diariamente, es posible que la espalda se dañe trayendo problemas musculares.
– Usarlo por mucha horas hace que el pie quede en un estado de cansancio y debilidad por lo cual es recomendable dejar descansar el pie al menos por una hora.
– Usarlos a largo plazo implica la posibilidad de que se acorte el tendón debido a la fuerte presión que se ejerce.
CONSEJOS
– No uses tacones de más de 7 centímetros.
– Es obligación que sepas caminar con ellos ya que de lo contrario, ninguno de los beneficios anteriormente mencionados, funcionará. Intenta practicar en tu casa diariamente si recién estás comenzando a usarlos o si siempre usaste y nunca supiste caminar, estás a tiempo de remediar tu error.
– Si usas zapatos con correas, elige los que tengan unas anchas ya que éstas tendrán a tu pie correctamente sujetado evitando posibles lesiones.
– Acude a un podólogo para que él determine si tienes un arco de pie alto o si tienes pie plano, esto ayudará a elegir el tacón adecuado y no tener molestias que podrían ser ocasionadas si eliges lo incorrecto.
– Usa los tacones con medias finas.
– No los uses para realizar actividades enérgicas tales como correr, andar en bicicleta, etc.
– Camina de la misma forma que lo harías con zapatos planos, con el tiempo podrás manejarlos y estilizar tu figura como tanto lo deseas.