En el exterior, el Feng Shui se hace parte del paisaje inmediato, contornos, vegetación, líquidos, absolutamente todo. De hecho, los aspectos de esta técnica en el exterior son los más apreciados e importantes.
Un exterior equilibrado produce una mejora de la energía alrededor de nuestro hogar. En esta técnica se mueven dos escuelas principales:
- Las formas: le da mayor importancia al paisaje, superficies, recursos naturales, etc.
- La brújula: explora las fórmulas matemáticas, y la influencia en el balance de la energía; sin embargo, lo importante para tener buenos resultados es la combinación entre ambas, las matemáticas y el ambiente externo -lo que nos rodea-.
Lo importante de un perfecto flujo de energía
La arquitectura actual, llena las ciudades de las “flechas envenenadas” –ángulos agudos y formas triangulares que apuntan directamente a nuestra casa-. La historia cuenta que hasta el siglo XX aproximadamente, las civilizaciones no ocuparon formas triangulares a la hora de construir, ya que cuidaban el entorno, y se preocupaban por el correcto flujo de las energías.
Feng Shui: El Ying y el Yang
Un aspecto fundamental del Feng Shui es el Ying y el Yang. Es aquí donde debe existir un complemento y un equilibrio entre ambos extremos, que llevarán finalmente a la armonía del jardín. El balance en este caso va a ser la dosificación correcta de la luz con la sombra, siendo el Ying las sombras y humedad, y el Yang el sol y la luz.
Las macetas en los balcones o jardines ¿Son buenas según el Feng Shui?
- Las macetas en balcones o jardines son perfectas, pero hay que tener cuidado con los tamaños y la frondosidad.
- También hay que estar atentos a las esquinas de los mobiliarios –nunca deben sus puntas mirar hacia la casa-.
- Si tienes techo en tu jardín debes cuidar que no se convierta en una zona muy Ying, recuerda que la buena iluminación, y en lo posible la luz natural ayuda al movimiento de las buenas energías.
Qué plantas se pueden utilizar
- Son ideales las enredaderas, pero siempre dejando un espacio de pared al aire. Los escalones y caminos deberían ser más bien curvos, para así evitar un estancamiento en las energías.
- Se recomiendan las plantas y árboles, como: peonias, crisantemos, ciruelo, narcisos magnolias, el bambú, los pinos, naranjos, melocotones; pero cuidado con las plantas con espinas, y los sauces y bonsáis -. Eso sí, evita –en lo posible- caer en excesos y/o fanatismos.