La joroba cervicodorsal de la viuda, también llamada “joroba de búfalo”, es una anomalía que se presenta comúnmente en las mujeres. Este término que es poco elegante designa una acumulación de grasa en la zona del cuello y los hombros.
La joroba búfalo no representa ningún peligro para la salud, pero puede causar molestias incapacitantes a las personas que la padezcan. A continuación, se describen algunos ejercicios recomendables para las persona que deseen disminuir o evitar su aparición.
¿Por qué aparece esta joroba en el cuerpo?
Cuando la curvatura en la unión entre la última vértebra cervical y la primera vértebra torácica se hincha, se denomina joroba cervicodorsal de viuda. Esta masa de grasa aparece generalmente en la edad adulta y se caracteriza por un crecimiento excesivo de tejido graso que crece lentamente en la base del cuello.
Aunque esta grasa puede eliminarse de la espalda con ejercicios y dieta, esta anomalía no desaparece espontáneamente por la pérdida de peso. Pero es posible superarlo adoptando ciertas prácticas.
¿Qué causa la joroba de búfalo?
La zona del cuello suele estar sujeta a un mayor estrés. Y con razón, esta región del cuerpo se encuentra entre una parte móvil, la columna cervical, y otra menos móvil, la columna torácica. Por lo tanto, algunas personas son más propensas a una mala postura.
Es decir, que el último factor puede deberse a un desequilibrio hormonal, sobrepeso, a la toma de determinados tratamientos farmacológicos o incluso a enfermedades como la osteoporosis o una debilidad de las vértebras.
¿Cómo mejorar la postura?
En caso de permanecer mucho tiempo frente al teléfono o el computador, es necesario que la persona se asegure de levantar la cabeza constantemente o colocar una almohada en el asiento para elevar el cuerpo a la altura del dispositivo.
Adicionalmente, es necesario asegurarse de que el posicionamiento de la pantalla sea el adecuado, además de no mantener la misma posición durante periodo prolongados.
Ejercicios para corregir la postura y mejorar la apariencia de la joroba de búfalo
Existen algunos ejercicios que pueden ser beneficiosos al momento de tratar este problema, sin embargo, lo más considerable es mejorar la postura al momento de sentarse. Algunos ejercicios son:
Realizar movimientos circulares de hombros
Este ejercicio es ideal para relajar el cuello y los hombros. Lo ideal es colocarse de pie con la espalda recta y las manos a lo largo del cuerpo.
Con un movimiento circular, debe mover lentamente los hombros hacia adelante y hacia atrás. Debe realizar este ejercicio durante 5 minutos.
Postura de la cobra
Esta postura puede fortalecer la columna. Para realizarla, debe acostarse boca abajo con las piernas estiradas y los pies juntos en una colchoneta de yoga. Colocar las manos en el suelo a la altura de los hombros y luego apoyar los antebrazos en el suelo.
Lentamente, debe levantar el pecho, mirando un punto fijo. Mantener esta posición durante unos segundos mientras respira lenta y profundamente. Debe tomar un descanso de diez segundos y realizar 20 repeticiones cada día.
Postura del gato
La postura del gato mejora la flexibilidad de la columna. Para realizarla, debe colocarse a cuatro patas con las manos apoyadas en el suelo. Respirar hondo, levantar la cabeza y arquear la espalda.
Mientras exhala, debe bajar la cabeza y llevar las piernas hacia adentro para redondear la espalda. Lo ideal, es repetir este ejercicio veinte veces.
