Ya empieza la recta final del verano y, para muchos, se acerca el retorno al trabajo y la rutina, mientras que otros ya están de vuelta. Nadie dice que es una tarea fácil, pero es posible mantener el buen ánimo adquirido en las vacaciones, y aquí te enseñaremos cómo.
Pensar a largo plazo y en las vacaciones del próximo año no ayuda a aterrizar
eficazmente en la rutina laboral, así que no lo hagas.
Después del verano puede que se pierda productividad en el trabajo y
aparezca el “síndrome postvacacional” durante el periodo de adaptación, que puede
durar entre una y dos semanas.
“Este síndrome es una forma de estrés que, como muchas otras, se refiere a
una reacción normal del organismo frente a cualquier situación que requiere
adaptación. En el caso del estrés post vacacional, se trata de un cuadro reactivo a
situaciones claramente delineadas y entendidas como polos opuestos, descanso
versus trabajo”, explica María Elsa Gac, psicóloga de Clínica INDISA.
La vuelta al trabajo, el cambio de horarios y la modificación de las horas de
sueño también contribuyen a esta situación, y es lógico desanimarse al cambiar el
mar por un escritorio.
“Si bien en muchas instancias, las vacaciones son en sí muy estresantes, el
sólo hecho de tener que reintegrarse a una rutina con responsabilidades y exigencias,
genera ansiedad. Este tipo de ansiedad se puede manifestar psicológicamente, con
irritabilidad, desgano, resistencia a ejecutar tareas específicas, depresión y
físicamente, con síntomas somáticos como insomnio, estreñimiento, alergias e
incluso gripes”, señala la especialista.
Está demostrado que hacer deporte es bueno no sólo para la salud sino
también para contribuir a bajar el estrés, por lo que el deporte será uno de tus
mejores aliados para combatir la depresión post vacacional. Además, una buena
alimentación y las horas de descanso apropiadas son indispensables para mantener un
buen estado de ánimo.
Finalmente todo está en la actitud. “Las personas se contaminan con la ‘mala
onda’. Es esperable que no se quiera volver al trabajo porque hay una percepción de
que es algo negativo y no se ve como parte de la vida normal; sin embargo, el
trabajo contribuye enormemente a la salud mental”, asegura Gac.
Consejos para hacer más fácil el regreso al trabajo:
1) Prepárate para regresar a la oficina.
Reserva unos días al final de tu descanso para adaptación. Eso te ayudará a disminuir
el estrés. Incluso, durante ese tiempo, puedes revisar tu correo y tomar nota de los
pendientes que tendrás para no verte tan abrumado el primer día.
2) Mantén una actitud positiva.
Es clave el buen humor, así es que tómate unos minutos para relajarte antes de
volver y después de comer, camina un poco.
3) Prioriza las tareas.
Usa la primera semana para organizarte y jerarquiza los pendientes para responder
de manera oportuna.
4) Deja el trabajo en la oficina.
No te lleves trabajo para la casa, esto le quitará la magia al descanso obtenido
durante las vacaciones.
5) Recupera el control.
Al volver, te darás cuenta de que no hubo ninguna catástrofe durante tu ausencia. Es
momento de retomar tus actividades sin que te obligues a absorber todo
nuevamente.
6) Descansa.
Realiza ejercicio, lleva una dieta balanceada y duerme ocho horas al día.