Las pieles sensibles son muy reactivas y necesitan cuidados específicos para evitar riesgos de alergias. Descubre nuestros consejos para cuidar las pieles sensibles.
Cómo cuidar la piel
Comienza por vaciar la estantería de productos de belleza y guarda tan sólo una o dos cremas. Las pieles sensibles suelen ser alérgicas y solo aceptan algunos productos específicos. Elígelos mejor sin aromas e hipoalergénicos para reducir el riesgo de alergia. Utiliza lociones limpiadoras suaves y vaporizadores de agua termal. No te olvides de secar la piel con un pañuelo de papel dando ligeros golpecitos. Utiliza tratamientos protectores calmantes y reguladores de la micro-circulación. De noche, utiliza una crema más rica e hipoalergénica.
Lo que debes evitar
Exfoliarte la piel o aplicarte mascarillas que pudieran irritar la piel. Olvídate de los jabones y las toallitas que agreden y secan la piel, y hacen que ésta sea todavía más reactiva. Evita los cambios bruscos de temperatura, los ambientes climatizados, el consumo de alcohol y ciertos alimentos como el café o las especias. Los productos de maquillaje también pueden causar alergia: para reducir los riesgos, elígelos hipoalergénicos. Si encuentras un tratamiento que te vaya bien, úsalo siempre: los cambios frecuentes sensibilizan la piel.
