La naranja es una fruta cítrica obtenida del naranjo dulce (Citrus x Sinensis), del naranjo amargo (Citrus x aurantium) y de naranjos de otras variedades o híbridos, de origen asiático.
Es un hesperidio carnoso de cáscara más o menos gruesa y endurecida, y su pulpa está formada típicamente por once gajos llenos de jugo, el cual contiene mucha vitamina C, flavonoides y aceites esenciales.
Se cultiva como un antiguo árbol ornamental y para obtener fragancias de sus frutos. Es más pequeña y dulce que el pomelo o toronja y más grande, aunque menos perfumada que la mandarina.
La naranja y la mandarina son algunas de las frutas con más propiedades y efectos beneficiosos para la salud. La cáscara y el jugo, de hecho, se usan para hacer medicamentos.
Incluso, algunas personas emplean las naranjas en la aromaterapia para ayudar con la ansiedad, la depresión y el sueño. Debido a las grandes cantidades de vitamina C que posee, investigaciones aseguran que podría ayudar al asma, debido a su componente antioxidante.
Posee igualmente potasio, lo cual evidencia que este componente ayuda a prevenir la presión arterial alta y los accidentes cerebrovasculares (ACV).
Beneficios de la naranja en el organismo
Los componentes de la naranja como el potasio, vitamina C y colina ayudan a la salud del corazón.
Para prevenir riesgos de enfermedades cardiovasculares, es necesario reducir la ingesta de sodio y aumentar la de potasio, por lo que este fruto reduce los riesgos de ACV.
Beber el jugo natural de este fruto previene la inflamación de las articulaciones lo cual ayuda a tratar la artritis reumatoide.
Protege las células de los daños por ser antioxidante.
Ayuda al organismo a producir colágeno, una proteína que cura las heridas.
Facilita la absorción de hierro.
Refuerza el sistema inmunológico.
Retrasa el avance de la degeneración macular relacionada con la edad, una de las principales causa de pérdida de la visión.
Controla la ansiedad, porque la vitamina C reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés y la presión arterial.
