Cada día más personas acuden a las redes sociales o a sitios web que ofrecen soluciones rápidas y milagrosas ante la obesidad o los kilos de más, así es como se involucran fácilmente en las “dietas relámpagos”.
¿Cómo afecta las dietas relámpagos la salud?
Las dietas relámpagos pueden tener graves consecuencias y aunque no se note, pueden alterar el aspecto exterior de quienes la practiquen.
De acuerdo con el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), alerta de los “posibles efectos secundarios o rebotes de aquellas dietas que prometen perder mucho peso en poco tiempo, ya que carecen de sustento científico y son insostenibles a largo plazo en caso de reducir el peso de forma saludable”.
Las consecuencias de estas dietas
1-. Las monodietas
Están basadas en el consumo permanente de un solo alimento, ejemplo: “la dieta del limón”, “la dieta de la piña”, “la del pepino” y pare usted de contar.
Estos son regímenes que supuestamente se encargan de que las medidas corporales desciendan en un breve lapso semanal.
Las monodietas pueden producir desequilibrios, pues tienen un aporte calórico demasiado bajo en relación con las necesidades del cuerpo humano.
Además, la ingesta excesiva de un nutriente, un ácido, o de cualquier tipo de fibra puede modificar las funciones digestivas, causando graves alteraciones en los sistemas metabólicos y digestivos; alteraciones que influirán en el sentimiento de ansiedad y cambios de humor.
2-. Las dietas muy bajas de calorías
Basadas en un bajo consumo de calorías que aseguran el descenso del peso corporal, estas dietas trabajan con los requerimientos diarios imprescindibles para mantener las condiciones mínimas de funcionamiento del organismo.
Además, en las redes sociales hay otras dietas prediseñadas que aconsejan sustituir la alimentación balanceada por una cantidad suplementaria de alimentos ricos en grasa o proteínas, y hasta algunas en las que se sustituyen una comida- o varias – por una merengada u otro tipo de brebaje .
Lo que se recomienda
En la mayoría de los casos, todas estas dietas desencadenan el temido efecto rebote, que nos llevará a ganar más kilos de lo que se tenía anteriormente. Por tal motivo lo más recomendado es ir a un experto nutricionista para saber cuál es la dieta más acorde a tus necesidades y tu cuerpo.