Supuestamente todos deberíamos soñar todas las noches, pero al despertar hay veces en las que no recordamos nada y creemos no haber soñado. Para solucionar este problema y ayudarte a recordar tus sueños te entregaremos algunos datos importantes que debes manejar para despertar al otro día consciente de lo que sucedió en tu cabeza.
Nuestros sueños se desarrollan en la fase REM, que es una de las etapas más profundas del dormir, si despiertas mucho en la noche o si duermes pocas horas probablemente no alcances a llegar a la fase REM, por lo tanto soñarías menos. Te recomendamos que intentes dormir por lo menos ocho horas diarias y en un lugar tranquilo para no despertar en medio de la madrugada.
Cómo recordar los sueños que tienes durante la noche
Es más fácil recordar los sueños en los primeros minutos luego de despertar, porque a lo largo del día los vamos olvidando. Te recomendamos que sobre tu velador tengas una libreta con un lápiz para anotar todo lo que recuerdes apenas amanezcas, no importa si es de noche o si ya amaneció. Una técnica similar usaba Dalí para pintar sus cuadros, al despertar dibujaba sus obras aunque fueran las 4 de la madrugada, porque tenía más vívido el recuerdo de sus sueños.
¡No uses una alarma escandalosa! Es lo peor despertar asustado, porque se bloquearán de inmediato los pocos recuerdos que podrías tener. Intenta despertar con una alarma calmada y sino, en lo posible, despertar solo. También te recomendamos no beber alcohol ni comer en exceso antes de ir a dormir, porque los químicos que poseen los alimentos grasosos o las bebidas alcohólicas podrían evitar que recuerdes tus sueños.
Por último relaja tu mente y tu cuerpo cuando estés acostado, piensa solamente en que quieres recordar lo que soñaste hasta entregarte a Morfeo.
