Conjuntivitis, orzuelos e infecciones a la córnea son las principales afecciones de nuestra vista. Cuando hablamos de proteger la salud, nos preocupamos de los problemas respiratorios, del corazón y tal vez de algún dolor de cabeza más persistente.
Pero ¿qué pasa con nuestros ojos?
Las infecciones en esta zona pueden afectar a uno o ambos ojos. Existen dos que son muy comunes como la conjuntivitis, que también es conocida como «ojo rojo». Con frecuencia les da a los niños y es muy contagiosa. Otra patología es el orzuelo, que consiste en un abultamiento en el párpado que ocurre cuando las bacterias de la piel entran en el folículo piloso de una pestaña.
Las infecciones a la córnea, conocidas por los oftalmólogos como queratitis infecciosas, es una de las consideradas peligrosas, debido a que puede provocar deterioro visual. “El principal factor de riesgo es el uso inadecuado de lentes de contacto. Es de vital importancia el aseo correcto de éstos con las soluciones que recomiendan en las ópticas, evitar el lavado con agua y nadar con ellos puestos, idealmente sacárselos en la noche y no prolongar su tiempo de vida útil”, explica el oftalmólogo de Clínica Avansalud, doctor Juan Enrique Becker.
Inicialmente los síntomas de las infecciones corneales son similares a los síntomas de otras infecciones: ojo rojo, ardor ocular, dolor, lagrimeo. “Frente a estos síntomas y en caso de estar utilizando lentes de contacto, el paciente debiera suspender el uso de éstos, guardarlos cuidadosamente en sus envases y consultar al especialista, quien si confirma el diagnóstico tomará muestras para cultivo del microorganismos e iniciará el tratamiento según el tipo de infección que se presente”, señala el especialista.
Tratamientos
Las infecciones oculares de tipo bacterianas, se tratan mediante el uso de antibióticos. Sólo un especialista puede determinar cuál es el indicado para cada tipo de bacteria.
En el caso de problemas virales, pueden ser resueltas en su mayoría sin ningún tipo de tratamiento y suelen desaparecer en pocos días. Pueden ser utilizados medicamentos descongestionantes o antiinflamatorios para disminuir la sintomatología. Si la infección viral es por Herpes, se debe tener en cuenta que para este virus si existen antivirales específicos y es muy importante su uso tanto tópico como sistémico para disminuir el riesgo de una cicatrización inadecuada o cambios en la calidad o cantidad visual.
Las infecciones por hongos se tratan mediante el uso de antibióticos antimicóticos. En muchos casos es indispensable su uso en forma sistémica, por lo cual será necesario el control del oftalmólogo y prevenir los efectos secundarios sobre riñón e hígado.
¡Así que atención y a cuidar tus ojos!
