¿Sabías que no nos hace bien comer solos? Hoy te vamos a hablar de las ventajas que tiene el comer acompañado y porque no es saludable hacerlo solo así que sigue leyendo porque se va poniendo interesante este artículo escrito especialmente para ti.
Hoy en día el individualismo está aumentando increíblemente en los seres humanos aunado a ello el ritmo de vida que muchos tenemos no nos permite sentarnos a compartir el momento de la comida con otras personas, sobre todo cuando ha llegado la hora de almorzar.
No hay nada más saludable que comer en una mesa compartida ya que juntarse con seres queridos a comer puede elevarte la autoestima ya que esta acción es más que una acción de nutrirse, crea vínculos y es sinónimo de celebración.
Sin embargo, esto en la vida real no siempre es así, aunque suene muy perfecto todo en realidad el ritmo de vida que llevan la mayoría de las personas no permite ir a casa y sentarte en la mesa junto a la familia a comer y si no es esta la razón son los televisores encendidos que perturban esa paz.
Los beneficios de comer acompañado
- Fomenta una alimentación más saludable: Si estas con alguien más es más sabroso preparar platos más elaborados a que si estas solo, los hábitos alimenticios son mayores si cenamos en familia y sobre todo si hay pequeños en la casa.
- Previene el aumento de peso: Comer en familia o en compañía te ayuda a dejar de comer tanta comida chatarra, congelada, llenas de grasas, azucares.
- Inculca buenos modales: Los buenos modales en la mesa son tradiciones de padres y abuelos que utilizan bien los cubiertos, tienen una buena comunicación con sus seres queridos mientras comen.
- Se desarrolla el contacto verbal: Compartiendo una rica cena en familia se pueden compartir los proyectos que se tienen a futuros, el día a día, los problemas y de este modo se vuelven más sociables los integrantes de la mesa.
- Se reducen las posibilidades de padecer depresión: Los jóvenes que comen con sus padres y hermanos tienen menos posibilidad de caer en las drogas o en los desórdenes alimenticios como la anorexia o la bulimia.