Una actitud de agradecimiento tiene el poder de convertir las debilidades en fortalezas, de unir personas y reafirmar vínculos, de hacer que los problemas se vuelvan soluciones y de lograr que cosas buenas entren en nuestra vida.
Los beneficios de ser agradecido son infinitos, sin embargo, hoy quisimos compartir cinco contigo, para que te des cuenta del poder que reside en tu interior y que necesita ser extrapolado.
Te hace feliz: La mayoría de los países con altos índices de felicidad tienen en común que su población es agradecida. Dar las gracias por lo que se tiene ayuda a crear un ambiente positivo y te llena de energía.
Beneficia a la persona que lo recibe: Ser agradecido no sólo te hace feliz a ti mismo, sino a quien recibe el agradecimiento. Puedes hacer que la otra persona se sienta bien consigo y valorada.
Fortalece relaciones: Como consecuencia de beneficiar a otros, fortaleces las relaciones con esas personas a las cuales agradeciste. Haces que se quieran acercar a ti y acompañarte.
Desarrolla una actitud positiva: Para agradecer hay que ver el lado positivo de las cosas, por lo tanto, siempre estarás buscando ese qué especial que te ayudará a agradecer un suceso, ya sea bueno o malo.
Te hace consciente del mundo a tu alrededor: Existe una cadena de “casualidades” que permitan que tu vivas, veas e interactúes con el mundo. Ser agradecido te hace consciente de esa cadena.