Antes que nada, es importante que sepas que no todas las personas tienen el mismo tipo de piel y lo que comemos a diario provocan ciertos cambios en ella, entre esos casos se encuentra el envejecimiento prematuro.
Obviamente no te vamos a decir que tienes que dejar de consumir algún alimento solamente debes saberlo hacer, tienes que saber que componentes trae y que beneficios y contraindicaciones para la belleza proporciona para tu piel
Como ya sabemos que todas las personas tienen un cutis diferente, el cual puede ser normal, graso, seco o mixto, por lo que es primordial conocer cuál es el estado en el que éste se encuentra para evitar caer en malas prácticas en cuanto a los alimentos que se ingieren.
Así como la piel, el cuerpo interpreta y se desfigura cuando optamos por alimentos con mala base nutricional. ¿Qué significa esto? Que contengan grasas trans como el tocino y tengan exceso de sal.
Lo más recomendable es consumir antioxidantes, los cuales brindan ese elixir de juventud que todas esperamos.
Este tipo se encuentra en:
- El té
- El vino
- Las frutillas
- Los kiwis
- El melón
- El pepino
- La piña
- La albahaca
- Entre otros.
Por eso siempre es recomendable someterse a controles médicos de toda índole, así sabemos cómo estamos y qué procesos podemos seguir según nuestras necesidades.
La importancia de no perderse el desayuno no es cuestión de cantidad sino de calidad porque es la primera comida del día y la que aporta la energía esencial para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo.
El no alimentarse correctamente influye en el envejecimiento prematuro de la piel.
¿Sabías que?
- La gelatina beneficia tu piel, baja las calorías y es rica en colágeno.
- El tomate tiene propiedades antioxidantes que brindan salud a la piel.
- El huevo también es un agente que brinda vigor al cabello y cuida las células de la piel.
- La salvia, muy utilizada en aliños, por su parte combate las infecciones de esta, además de ser una planta comestible actúa como medicamento para diversas dolencias.
Por supuesto de más está decir que el beber agua contribuye a que la piel se hidrate, hacer esto a diario aporta belleza y salud y se eliminan las toxinas del organismo, lo mismo pasa cuando mantenemos una vida sana y hacemos ejercicio.
Al final la nutrición de la piel depende de nosotros, refleja nuestro estado interno y es ahí cuando aquel dicho “somos lo que comemos” parece bastante acertado.
