En general, se sabe que las dietas más saludables y de efectos más duraderos son aquellas que se extienden en el tiempo y donde la pérdida de peso es paulatina y lenta. En el caso de esta dieta, lo ideal es que se extienda por al menos una semana, en la que podrás perder hasta 3 kilos. Lo bueno de la dieta del té rojo es que además de ayudarte a reducir la grasa corporal y el colesterol, da bienestar y es tranquilizante.
Este tipo de té se da de la maduración del té verde; es usado desde muchísimo tiempo para adelgazar, algunos beneficios son:
– Tiene efectos anticancerígenos. Esto es debido a los químicos presentes en el té como los son las catequinas y las vitaminas antioxidantes.
– Aumentar el gasto calórico, por aumentar el metabolismo, de esa forma, quema calorías más rápidamente.
– Es un excelente desintoxicante hepático, ayuda a eliminar toxinas y residuos del cuerpo.
– Refuerza el sistema inmunológico, preserva de las infecciones y posee efectos bacteriostáticos.
– Facilita la digestión de las comidas con alto contenido graso. Estimula la actividad vesicular, emulsionando mejor las grasas.
– Es un excelente antioxidante, por lo tanto ayuda a la renovación celular.
– Aumenta la circulación sanguínea en el cerebro y contribuye a mejorar la atención mental.
– Es diurético, estimula al riñón a eliminar el exceso de líquidos.
El té rojo puede acompañar cualquier dieta para adelgazar, la idea es tomar 4 tazas de té rojo a día, para aumentar la pérdida de peso y la desintoxicación.
Recuerda consultar con tu médico ante cualquier duda. Eso sí, antes de empezar con la dieta, ten en cuenta que no es recomendado para los siguientes casos: niños, embarazadas y personas sometidas a un tratamiento médico continuado o con alteraciones del ritmo cardiaco. Tampoco se recomienda ante situaciones de úlcera, anemia, insomnio o nerviosismo.
En el caso de la dieta del té rojo es preferible consumir alimentos ricos en carbohidratos (pasta, arroz, legumbres y pan integral) y hortalizas, además de mantener un consumo restringido de proteínas, que se obtendrán principalmente con el consumo de pescados y huevos.
Alimentos prohibidos: Azúcar, dulces, carnes, grasas, lácteos, plátanos, higos, uvas.
Desayuno
– Infusión de té rojo con jugo de naranja o una fruta.
– 1 rebanada de pan integral con mermelada sin azúcar.
Comida (elegir una de las 4 opciones)
– Ensalada de pasta
– Ensalada de arroz
– Arroz con verduras
– Arroz con tortilla francesa.
Postre:
– 1 fruta + infusión de té rojo.
Snack:
– Infusión de té rojo.