El herpes labial son ampollas rojas llenas de líquido que se forman cerca de la boca o en otras áreas de la cara. En casos raros, pueden aparecer úlceras bucales en los dedos, la nariz o el interior de la boca. Por lo general, están agrupados en parches. El herpes labial puede persistir durante dos semanas o más y se hace más frecuente en los meses de calor.
Un virus común llamado herpes simplex causa herpes labial. Se pueden transmitir de persona a persona a través del contacto cercano, como besarse. Las llagas son contagiosas incluso cuando no son visibles.
No hay cura para el herpes labial, y pueden regresar sin previo aviso. Ciertos medicamentos pueden usarse para tratar el herpes labial y evitar que vuelvan.
¿Qué causa el herpes labial?
Los herpes labiales son causados por el virus del herpes simple. Hay dos tipos de virus del herpes simple. El virus del herpes simple tipo 1 (HSV-1) generalmente causa herpes labial, y el virus del herpes simple tipo 2 (HSV-2) generalmente causa herpes genital.
Las llagas reales son similares en apariencia para ambas formas del virus. También es posible que el HSV-1 cause llagas en los genitales y que el HSV-2 cause llagas en la boca.
El herpes labial visible es contagioso, pero puede extenderse incluso cuando no se puede ver. Puede contraer el virus del herpes simple al entrar en contacto con personas infectadas. Esto puede suceder a través de besos, compartir cosméticos o compartir alimentos. El sexo oral puede propagar tanto el herpes labial como el herpes genital y todas estas características son más frecuentes durante el verano.
Reinfección
Una vez que se contrae el virus del herpes simple, no se puede curar, pero se puede administrar. Una vez que las llagas se han curado, el virus permanece latente en su cuerpo. Esto significa que pueden aparecer nuevas llagas en cualquier momento cuando el virus se reactiva.
Algunas personas con el virus informan brotes más frecuentes cuando su sistema inmunológico es débil, como durante una enfermedad o momentos de estrés.