- La tecnología puede ser un importante factor de motivación para hacer deporte y estar en forma. Si sabes cuántas calorías quemas en cada paso o tienes una rutina distinta para cada día, es muy probable que te esfuerces un poco más en completar tus ejercicios.
Correr por la calle y saber exactamente cuántas calorías quemas en cada paso, es hoy una realidad. La tecnología ha llegado al deporte para quedarse. Lo importante es que el usuario saque el máximo provecho de las múltiples aplicaciones y programas que pueden bajar a un solo click de distancia.
Si antes sólo las máquinas de gimnasio más sofisticadas entregaban datos sobre tu cuerpo durante la actividad física, actualmente tu celular puede entregar y almacenar importantes datos de tu rendimiento deportivo.
“Antes sólo los deportistas de alto rendimiento cronometraban y registraban sus entrenamientos, pero hoy con el incremento del uso de tecnologías móviles y de aplicaciones para Smartphone, los deportistas urbanos o de fin de semana pueden hacerlo y mejorar su rutina con todos los datos entregados”, explica Guillermo Bustamante, coordinador de Comunicación Digital y Multimedia de la Universidad del Pacífico.
¿Pueden las aplicaciones ayudar a crear un hábito deportivo? “Las aplicaciones ayudan al usuario a tener control sobre lo que está haciendo: entrenamientos, comidas, peso y rendimiento. Esto básicamente sirve para mantener una rutina adecuada y llevar un registro de los logros. Además, los datos que entregan las apps se utilizan para mejorar las marcas y al mismo tiempo, gracias a las “notificaciones push” (mensajes de las aplicaciones al teléfono), permiten mantener cierta constancia en las rutinas de ejercicios”, asegura el experto, quien además es runner aficionado
Así, las constantes notificaciones y avisos permiten tener más presente el deporte en la vida cotidiana. Existen algunas aplicaciones que hasta animan a seguir en la rutina. “El tema del progreso es muy importante, porque la aplicación ordena y gráfica todos los datos de los entrenamientos de manera prácticamente automática, algo que sería difícil que una persona pueda hacer en poco tiempo. En tanto, la mayoría de las aplicaciones permiten compartir los resultados en los perfiles de redes sociales, lo que hace que el entrenamiento sea mucho más social y puedan existir recomendaciones de otros usuarios sobre horarios, rutinas de ejercicios y lugares para practicar deporte”, asevera Guillermo Bustamante.
La mayoría de las aplicaciones disponibles son gratuitas, aunque en algunos casos hay un cobro de no más allá de 10 mil pesos, pero que entregan funciones extras que permiten tener acceso a más datos. “La efectividad de la aplicación va a depender del uso que cada persona le dé. Tener una aplicación instalada no garantiza el éxito de una rutina. La constancia en este espacio es clave. Muchos usuarios desinstalan la aplicación después de un tiempo, porque ésta no fue lo suficientemente efectiva. Habría que preguntarse si se usó la aplicación realmente a consciencia”, cuestiona el docente de Comunicación Digital y Multimedia de la U. del Pacífico.
¿Cómo elegir la aplicación correcta? “Lo primero que hay que tener claro es el objetivo que se quiere alcanzar y luego buscar en sitios especializados nombres de aplicaciones que puedan servir. Por ejemplo, si mi objetivo es entrenar para una maratón, lo óptimo es ver qué me recomiendan en las comunidades especializadas en la materia. Una vez que tengo seleccionada la aplicación, siempre es útil leer los comentarios que otros usuarios han realizado en la misma página de la tienda online. Muchas veces sucede que hay incompatibilidades con el modelo de teléfono que tengo o restricciones geográficas”, advierte el académico.
El uso de wearables (tecnología vestible), como relojes o pulseras, está siendo cada vez más utilizado entre quienes practican deporte, porque no requiere que el usuario ingrese muchos datos ni cálculos. “Este tipo de tecnología es una forma más transparente y fácil de usar, ya que no complica al usuario cuando hace deporte”, describe Guillermo Bustamante.
Para los que aún no se deciden a comprar un reloj de última generación para medir la actividad deportiva, el coordinador de Comunicación Digital y Multimedia de la U. del Pacífico recomienda tres aplicaciones para hacer deporte:
- UP by Jawbone: Si bien no es una aplicación sino un wearables (tecnología vestible), es mucho más transparente, ya que calcula automáticamente las actividades físicas realizadas por el usuario, pidiendo que éste solo ingrese sus comidas diarias.
- RunKeeper: Ideal para quienes desean tener un buen control sobre lo que hacen, independiente del deporte que practiquen, ya que esta aplicación se puede utilizar para running, ciclismo, natación, yoga y crossfit.
- Seven: Es una de las aplicaciones más populares. Entrega una rutina de ejercicios diaria de siete minutos, donde se ejercita gran parte del cuerpo.