Si vives en un espacio reducido, como departamentos o casas pequeñas y deseas tener un animal que te alegre todos los días y que juegue contigo hasta el cansancio, el hurón es tu mascota ideal.
Este animal se caracteriza por su adicción a los juegos y su hiperactividad, eso sí para mantenerlos hay que saber educarlos -sobre todo su comportamiento con los demás integrantes de la familia-, mantener su espacio limpio –ya que son bastante hediondos- y llevar un registro de las visitas a su veterinario.
Antes de adquirir esta mascota debes conocer sobre sus cuidados básicos y la dieta necesaria para que crezcan fuertes y sanos.
Los hurones son animales completamente carnívoros, por ende deben alimentarse con comida especial para ellos o con alimento Premium para gatos. La comida siempre debe estar a su libre disposición, junto con agua limpia y los suplementos necesarios para su crecimiento –dependerá de la opinión del veterinario-. Nunca le des alimentos altos en fibra, ya que su intestino no tiene mucha flora intestinal, por lo que les cuesta digerir la fibra, y el resultado de ese tipo de alimentación puede provocar diarrea.
Como cualquier ser vivo, los hurones pueden presentar ciertas enfermedades que son mortales para ellos, como el distemper, por eso es de vital importancia que lleves a tu mascota a con un veterinario que se dedique al tratamiento de hurones y sus enfermedades.
Con la higiene debes ser muy prolija. Si come obviamente defecará, así que al igual que tú cuidas tu entorno, su espacio debe estar siempre limpio y sin heces. Debes limpiar todos los días su jaula y al menos una vez por semana aplicar detergente. Recuerda que las deposiciones del animal no sólo son dañinas para ti, sino que también para tu mascota.
Es importante que la jaula sea amplia para que el hurón pueda moverse con facilidad y quepan el pocillo con alimento, su cama, un juguete, el espacio para defecar, y otros elementos de entretención y mantención; pero todo dependerá de la cantidad de tiempo que mantengas al hurón encerrado.
Los hurones por naturaleza viven en madrigueras, por eso el hábitat que le construyas debe ser similar; es decir, tu animalito necesita un lugar oscuro y protegido, para eso puedes utilizas sacos, camas o hamacas, las cuales debes cambiar una o dos veces por semana para ventilarlas y limpiarlas, al igual que los objetos que ocupe para jugar.
Báñalo como máximo una vez al mes y no antes de los cuatro meses. Los hurones son bastante limpios, y bañarlo en exceso dañará su piel y pelaje. Además los baños no deben ser con el agua demasiado caliente, ya que estos animales son altamente sensibles al calor; por eso mucho cuidado con la exposición al sol y los baños con altas temperaturas. Y recuerda también estar atenta a las corrientes de aire y al frío del invierno, los cambios de temperatura son perjudiciales para su salud.
Preocúpate también de limpiarle los oídos, de lo contrario contribuirás a aumentar el olor ya desagradable de estas mascotas, y una acumulación exagerada de cera puede producir infecciones en el aparato auditivo de tu hurón. La limpieza la debes hacer por lo menos una vez cada quincena como máximo.
Cuidados del bebé hurón
1. Por primera vez tu bebé está lejos de sus compañeros, por eso es necesario darles seguridad y confianza para que se acerque a ti.
2. Los bebés hurones tienden a morder todo como forma de comunicarse o explorar, por eso debes enseñarle a evitar ese tipo de conductas. No lo golpees, enséñale con amor y paciencia.
3. *Evita que coma alimentos que no están incluidos en su dieta, recuerda que cuando son pequeños les gusta morder todo y podrían tragar plásticos y cosas extrañas que pueden ahogar a tu mascota.
*si ves que traga un objeto extraño, revisa sus excreciones o acude a su veterinario.