Son muchos de los factores que forman parte de tus actividades diarias y, sin saberlo, te están haciendo envejecer. ¡Tranquila! a continuación encontrarás algunas medidas para detener el reloj.
1.- El ambiente: las toxinas y la contaminación que está presente en el aire se vuelven radicales libres de la piel y destruyen el colágeno natural que hay en ella.
2.- Factor solar alto: Evita productos con el compuesto oxibenzone y aléjate de protectores solares mayor a 60, su efectividad no es tal si daña y obstruye tu delicada piel.
3.- Las flacas envejecen más rápido: las personas con un metabolismo alto lucen mayor antes de tiempo, esto ocurre porque quemar la energía con las células es otra fuente de radicales libres.
4.- El azúcar: reacciona con la proteína que es de lo que está hecho el colágeno que rellena la piel, tu tejido se endurece y oscurece. Elimina los dulces y golosinas de tu dieta y opta por cremas con colágeno o péptidos.
5.- Deshidratación: al igual que una flor que no se riega y muere, tu piel necesita de al menos 2 litros de agua al día para no opacarse ni ponerse tensa. Las dermis no pueden perder este vital elemento porque al perder la humedad dejará de producir nuevas células.
6.- Grasa = fuente de juventud: aunque no lo creas algunos aceites tienen altas propiedades antienvejecimiento como el aceite de manzana y de rosas. Estos compuestos llegan a niveles tan profundos de tu piel y organismo que son capaces de estimular la producción de colágeno justo en los lugares que lo necesitas.
7.- Botox causa flacidez: muchas celebridades de Hollywood usan este producto para paralizar los músculos de su cara y eliminar las arrugas de la piel. Si bien puedes tener un aspecto jovial en una primera instancia, los músculos que no se usan se atrofian y aparece la flacidez.
Ya estás enterada… saca estos malos hábitos de tu rutina y verás como deja de sonar ese tica-tac del reloj biológico que tantas mujeres desean detener.