1. La felicidad no es algo constante
Si la felicidad en nuestras vidas fuera constante, no sabríamos disfrutarla ni comprenderíamos el valor que tiene. Para vivir días felices, es necesario atravesar por momentos amargos. No te desilusiones si las cosas no te resultan, piensa siempre que luego de la tormenta viene el sol.
2. Los errores son situaciones transitorias que sirven para enseñar lecciones
Si no nos equivocamos, no aprendemos. Es así de simple. Con frecuencia las mayores lecciones que hemos aprendido a lo largo de nuestras vidas, han surgido como consecuencia de un error.
Todos nos equivocamos y es necesario aceptar este hecho para poder superarlo.
3. El progreso es parte de todos los días
Aunque no lo notemos, siempre estamos avanzando con proyectos, ideas y demás. Las personas perfeccionistas, por ejemplo, creen que si no aprenden algo al 100% no pueden estar tranquilos. Necesitan terminar lo propuesto para sentirse satisfechos, sin tomar en cuenta que esos pequeños pasos avanzados sin duda los llevarán a la meta. Aprende a querer esos pequeños logros y avances para alivianar tu carga emocional
4. Lo que sientes cuando estás estresado no tiene por qué ser la realidad
El estrés tiende a hacer que potenciemos lo negativo, que todo lo veamos peor de lo que es. Que tengas miedo no significa que estés en peligro, que te sientas solo no quiere decir que no le importes a nadie y, aunque no lo creas en ese momento, siempre habrá una persona dispuesto a ayudarte y a sacarte de ese agujero en el que estás. Trata de calmarte, respirar y luego tomar decisiones o emprender proyectos, así evitarás las visiones pesimistas.
5. Tu pasado no define tu futuro
No importa que tan terrible haya sido tu pasado, siempre puedes mejorarlo y llegar al futuro con vistas de auto superación. Todos esos errores que cometiste, las personas que perdiste y las cosas que aprendiste y quieren cambiar no definen tu personalidad, son sólo vivencias. Recuerda siempre que tu esencia va más allá de las cosas que has vivido, pues se mantiene a pesar de todo.